Resumen de Críticas - 2012
“La razón domina excluyente a la
pasión, en la cuidadosa dirección de Marcelo Velázquez. Josefina Vitón se
muestra seductora y convincente como Julia, en tanto la contención de Paula
Colombo concurre a su muy bien resuelta criada. (…) la intensa presencia de
Gustavo Pardi como un sólido Juan (servido con excelentes armas actorales) pasa
a constituirse en el protagónico más atractivo y rotundo. En algún caso, el
abordaje “traiciona” en parte la intencionalidad de Strindberg, para seguir
siendo, paradójicamente, más fiel a sus lecturas colaterales.”
Luis Mazas – Revista Veintitrés
“Gustavo Pardi realiza una
interesante composición que permite mostrar con acierto esa ambivalencia que lo
lleva de la soberbia a la sumisión. Una convincente transición entre las dos
facetas del personaje de Juan. La puesta de Marcelo Velázquez se ajusta con
precisión a las exigencias de la versión que realizó Enrique Papatino, donde
toda la escenografía está al servicio del texto y se percibe que Velázquez
logra el tiempo apropiado para alcanzar una efectiva dinámica.”
Susana Freire – La
Nación
“Si bien traslada el lenguaje al
habla rioplatense, la versión de Papatino dirigida por Velázquez respeta las
pautas de realismo que plantea Strindberg a fines del siglo XIX, con un ámbito
que transmite el ambiente rural con pequeños detalles (…). Es interesante el minucioso rastreo psicológico que lleva a
los personajes a sostener diálogos en que la evocación, el presente y los
sueños se entrelazan, que la versión aprecia y subraya. Hay también un gran
respeto por el juego del autor, con un Gustavo Pardi de cuidada inflexión y una
Paula Colombo imbuida de su rústica cocinera.”
Héctor Puyo – Diario Popular
“Josefina Vitón logra dotar a
Julia de la picardía, altanería y desesperación que conviven en la joven. Pardi
hace un trabajo brillante, muestra las dos caras de este personaje con soltura
y naturalidad, Paula Colombo resuelve muy bien lo que su personaje requiere
desde lo corporal y actitudinal. En lo que respecta la puesta escenográfica, si
bien los hechos se dan en la cocina, se sugiere el resto de los ambientes de
manera muy original. El vestuario es sumamente acorde, pinta las diferencia de
clases y juega un rol fundamental en cuanto al accionar de Juan
principalmente.”
Cecilia Alejandra Accorinti - Show On Line
“La puesta de Velázquez conforma
de este modo un Strindberg en el que además a la mimesis diegética proveniente
del texto, se suman los signos escenográficos, lumínicos y de sonido que
coadyuvan a una puesta realista y se quiebran como hojas secas en cada ocasión
en que congelados, los artistas miran a un afuera, observador y cuestionador,
muy bien construido desde un adentro que deja esa duda perenne y ejecuta una
puesta en abismo. ¿Se saben observados por la sociedad que los juzga? ¿Se saben
observados como participantes de un rito teatral?”
Teresa Gatto – Puesta en Escena
“Este director que ya ha sabido
degustar el placer de transitar por los clásicos universales, así como también
ofrecernos un recorrido por algunos dramaturgos contemporáneos, logra
nuevamente valerse del universo discursivo de las teatralidades canónicas y en
esa apropiación realiza su propio gesto poético. (…) Sueños y realidad se
contraponen, así como se oponen los representantes del pueblo a la unión de
clases y todo esto es narrado desde un mínimo espacio escenográfico que,
acertadamente realizado por Gastón Nanni, logra acentuar y destacar la
articulación entre escena y extra escena.”
Lía Noguera – Revista Ruleta China
“La actuación de Gustavo Pardi,
es no sólo verosímil, sino por momentos, excelente, su Juan toca todos los
registros y logra los matices necesarios, de alguna manera el punto de vista de
la puesta pasa por él. Naturalismo sin fisuras en la textualidad de Strindberg,
naturalismo en abismo en la puesta de Velázquez, que exalta los determinismos,
y juega con la verdad escénica, desde el ritual de la comida y el vino hasta la
muerte del pájaro; símbolo anticipatorio de la muerte de Julia, la social y la
real.”
Azucena Joffe / María de los Ángeles Sanz – Luna Teatral
“El espectáculo Señorita Julia de
Marcelo Velázquez (notable director de Acreedores y de Ofensa) es una versión
muy bien hecha y dirigida de un texto clásico y moderno de un autor imprescindible;
un espectáculo que es más que bienvenido en el centro del circuito del teatro
independiente porteño por el nivel de sus rubros artísticos y técnicos, por la
precisa adaptación de Enrique Papatino y por el nivel actoral promedio del
elenco, elevado notoriamente por el aporte de Gustavo Pardi (que ya había
sobresalido en Los Invertidos).”
Christian Lange – Poiesis Teatral
“Josefina Vitón realiza una
correcta lectura sobre su personaje: la joven aristocrática puede bien ser
interpretada a través de sus rasgos neuróticos y su tendencia ninfómana, sin
embargo Vitón logra aprovechar esa noche de San Juan que envuelve a los
personajes eliminando imaginariamente los niveles que todos, y no solo ella, se
encargan de marcar, para encarnar una Señorita Julia que no puede evadir su
situación actual y que restringe cada vez más su derecho a pensar y elegir. (…)
La dinámica de la pieza se mantiene intacta: temáticas como la batalla de los sexos, la lucha de clases,
las relaciones humanas y la religión invaden la escena gracias a un excelente
trabajo del elenco en conjunto, otorgando la oportunidad de elegir un clásico
para volver a ver.”
Julia Panigazzi – A sala llena
“La lograda adaptación de Enrique
Papatino dirigida por Marcelo Velázquez cuenta con una muy buena puesta en
escena, una bien resuelta escenografía y un impecable vestuario. La obra
presenta una realización de gran calidad y, desde la producción, el resultado
es muy elogiable. En cuanto a las actuaciones, Gustavo Pardi, en el papel de
Juan, un lacayo amoroso y despreciable según las circunstancias, es uno de los
mayores placeres de la obra y su actuación es sobresaliente. Un actor ideal
para papeles complejos. Los personajes femeninos, Josefina Vitón como la
señorita Julia y Paula Colombo como la cocinera, completan el triángulo amoroso
jugando sus papeles correctamente.”
Martín Fernández Tojo – En escena hoy
“Marcelo Velázquez plantea un
hecho teatral que respeta puntillosamente el desarrollo interno de los
personajes, no le teme al tiempo externo de la obra, el se centra que cada
personaje encuentre su propio tempo en la exhibición de todas sus facetas. En
este desplegarse se podrán ver las intricadas transiciones de cada uno de ellos
y de sus entrecruces surgirán momentos de intensidad dramáticas. Dentro de esta
propuesta se puede observar como Gustavo Pardi (Juan) juega maravillosamente
esos dobleces realidad/impostación llevando a su personaje al borde de lo
grotesco; lo mismo sucede en la tensión interna que transmite Paula Colombo en
su Cristina; Josefina Vitón atrapa ese “no ser” de Julia.”
Gabriel Peralta – Crítica Teatral
“Los intérpretes hacen un uso muy
interesante de la cuarta pared, algo que casi se ha perdido últimamente. Las
actuaciones están encarnadas en los cuerpos y sobre todo, las voces de los
actores, muy bien trabajadas. La versión adaptada por Enrique Papatino está
actualizada, sin perder su tono histórico. Todo ello, enlazado por la dirección
de Marcelo Velázquez.”
Silvia Urite – Notas de Teatro
“La de Marcelo Velázquez es una puesta
acertada por su sentido del tiempo, su coloratura y por la buscada melancolía
que tan bien transmiten Josefina Vitón (Julia), Gustavo Pardi (el criado) y
Paula Colombo (su mujer). Hay respeto por el corte naturalista de la pieza, que
incluye una cocina con sus enseres, pero también hay sutiles aciertos de
sonido, como cuando el chairar de una navaja se prolonga más allá de la acción.”
Héctor Puyo – Revista Acción
“La señorita Julia que se exhibe
en el Teatro El Extranjero, es una obra fiel al gran texto de Strindberg, que
se adapta a la actualidad en sus temas -el poder, la vergüenza social, etc.- y
que cuenta con una sutil pero muy efectiva intromisión de la iluminación de
Alejandro Le Roux y la música original a cargo de Pedro Rossi. Pero lo que se
destaca por demás, vale la insistencia, es la gran labor de Gustavo Pardi.”
Emiliano Basile – El aura cultural
“Es ésta una de las mejores
puestas de la Señorita
Julia de las muchas realizadas en Buenos Aires. Marcelo
Velázquez ha sido muy fiel fiel a las indicaciones y al espíritu del autor.
Dejó intacta la sustancia y aun la escenografía y el vestuario, impecables. (…)
La actuación de Josefina Vitón logra transmitir sus tensiones y lo irremediable
de su lucha. Gustavo Pardi transmite de manera excelente todos los registros,
con absoluta naturalidad, y verosimilitud. Paula Colombo es una Cristina por
demás sobria, a quien se le debía haber marcado su condición de mujer del
pueblo que no aspira a nada – o nada más que a tener su hombre.”
Horacio Martínez – Teatro del Mes